Al barquero compasivo
Llévame ahora, Caronte,
cuando aún recuerdo tu nombre y el mío:
Amanda, el elegido,
los apellidos heredados lancémoslos al agua....
de nada sirven ni han servido.
Llévame ahora, Compasivo,
cuando mis piernas aún pueden dar el gran salto.
No esperes las lunas tristes del mañana
en que he de reptar como un gusano.
Llévame ahora, Incorruptible,
cuando aún persisten cuatro pelos en mi pubis
y mi pezón izquierdo, siempre más altanero,
camina erguido hacia lo inevitable.
Llévame ahora y completa,
con cada parte de mis partes en su parte.
No me castigues con el desmembramiento
con el desarme de mi vida en vida.
Llévame con un algo de frescor en la memoria
para firmar así mis deseos de despedida:
Que nadie me recuerde, que nadie me olvide
Nadie más que NADIE estuvo siempre a mi lado.
Llévame ahora, Atinado,
mientras ondean pañuelos blancos y besos en el puerto.
No me condenes a la humillación de sus espaldas...
Yo siempre miré de frente.
Llévame ahora hasta el abrazo de mis hermanos:
los que como yo, nunca aceptaron ni entendieron,
ni supieron descifrar la ausencia de sentido.
Llévame al dulce oasis de La Isla de los Muertos,
el lugar de llegada de donde nunca hube de partir.
Llévame a recordar y reencontrar sus remansos
para refrescar mi frente y mis recuerdos candentes:
no hubo fuego que no se ensañara en mi pecho,
el hielo, sólo anidó en la curva de mi espalda.
Llévame pronto y en lento,
mudo barquero de los mitos ciertos.
Llévame desnuda de subterfugios y aún de mis textos.
Estos, han de quedar en esta orilla,
dispersos de puerta en puerta
como herencia descartada, no deseada
mas, a falta de referencias
única prueba confiable de mi inútil existencia.
Quilicura, 7/06/07
Texto e imagen de Amanda Espejo, La Mancha.
Comentarios
que puedo decir
si hoy dás cátedra
muakismuakis
Me encanta como quedó y agradezco tanto al Puñal como a Elisa por sus Buenas vibras en cuanto al hecho literario.
Amanda